Acámbaro, Gto.- Este domingo por la mañana, alrededor de las 7:30 horas, el policía municipal Miguel Ángel N salía para irse a trabajar, pues le tocaba comenzar turno a las 8:00. Sin embargo, delincuentes lo estaban esperando afuera de su casa y lo asesinaron con armas de fuego.
«Migue», como sus familiares y amigos decían al preventivo, vivía en la calle Prolongación Abasolo, en la colonia Rancho Grande, y al despedirse de su esposa e hijos parecía un turno dominical como cualquier otro.
Dio unos pasos en la calle, enfilándose hacia la calle Colón, pero no se había alejado ni 10 metros de su vivienda cuando cayó abatido. El cuerpo quedó tirado a media calle y, tras escuchar los disparos, familiares y vecinos se asomaron para enterarse de lo ocurrido.
El elemento yacía boca abajo, llevaba puesto su uniforme el cual se empapó de la sangre del policía.
Tras los reportes al 911, compañeros del oficial acudieron enseguida. Corroboraron el deceso del elemento y, con patrullas de la corporación, cerraron la calle para resguardar la escena.
En el lugar fueron hallados diversos casquillos, los cuales fueron levantados como parte de la evidencia forense por parte de la Fiscalía General del Estado, aunque no se informó el calibre del arma empleada para acabar con la vida de Miguel Ángel.
Según la organización Causa en Común, en Guanajuato han sido asesinados 35 agentes de seguridad de todos los niveles, con ello, se mantiene a la cabeza de asesinatos de policías.
Información de la Silla Rota Guanajuato