Moroleón, Gto.-Hay les pasamos estas perlitas que nos han llegado respecto al cómo se ha desenvuelto el SMAPAM moroleones desde su creación y más ahora en el tempo en que ha estado al frente MARQUITOS VILLAGOMEZ, mas por amistad personal del edil Jorge Zamudio que por méritos propios como para representar tan elemental organismo para la vida cotidiana de más de 22 mil usuarios que pagan religiosamente su servicio bimestralmente.
Lo anterior que les vamos a comentar nos ha llegado de parte de un lector cuya identidad se omite por razones obvias y que de alguna forma ha estado inmerso en el funcionamiento de tal dependencia.
En primer lugar nos informan lo que ya en todo Moroleón es un secreto a voces, sobre el nefasto nepotismo que impera desde hace años y está plagado de parientes del director en turno y del eterno asesor, ESQUIPULAS ALMANZA, quien por obra y gracia a su buena estrella, percibe un salario de más de 40 mil pesos mensuales y que está enquistado en dicho organismo desde hace más de 25 años y lo peor del caso es que administraciones han llegado y salido, al igual que consejos de administración y este personaje sigue bien firme siendo favorecido por la nómina de los moroleoneses contribuyentes.
En el último bimestre, se hizo un aumento a los recibos de 8 pesos por cada toma y lo peor de todo también, sin aviso previo a nadie, siendo esto a pesar de un autentico abuso, un descaro. Multiplique usted gentil lector 8 pesos por 22 mil usuarios y tomas y se dará cuenta de lo que estamos hablando. Al igual multiplique un promedio de 180 pesos por 22 mil tomas y se dará someramente cuenta de la minita de oro o caja chica de presidencia municipal.
Nadie sabe, nadie supe en Moroleón y más en la opinión pública local, cuánto entra de dinero cada bimestre por consumo o pago de dicha cantidad de usuarios al organismo operador en cuestión de ingresos. Tampoco cuanto se gasta en nómina, ni cuántos trabajadores hay en dicho sistema regulador del suministro del agua potable a lo moroleoneses.
En fin, a pesar de ser un organismo público, MARQUITOS VILLAGOMEZ, así como el tal ESQUIPULAS ALMANZA, igualitos que todos los que han pasado como administradores, han confundido al SMAPAM con su fuera de su propiedad o en una empresa privada que no tiene obligación de dar a conocer ningún estado financiero a los usuarios que son los que les pagan sus salarios. Ya sabemos la eterna excusa que solo los regidores han recibido dichos informes, pero entre regidores que han desfilado también en dicho nombramiento y los directivos del agua potable en el Moroleón de hoy, han servido para lo mismo, en este tipo de cuestiones. Hay se las pasamos al costo. Hay más prietitos o perlitas. Esas se las guardamos para no atiborrarlos.